Guía Para Padre

Sobre Vacunas

Reconocimientos

Esta guía, al igual que Boost Oregon, es el resultado del gran esfuerzo de toda la comunidad. Joel Amundson, M.D. y Nadine Gartner son los autores principales. Gary Ashwal, Paul Cieslak, M.D., Alison Dent, Stacy Matthews, Michele Rossolo y David Solondz, M.D. aportaron información valiosa. Muchas gracias a todos los padres voluntarios que contribuyeron sus experiencias a esta guía.

El diseño de la guía y sus gráficos originales hecho por Diana Tung. Traducción al español hecho por Alicia Ramirez con revisiones por Leah Klass y Maria Peña. Varias fundaciones comunitarias apoyaron este proyecto con donaciones generosas.

Finalmente, estamos agradecidos por los centenals de donaciones de donadores individuales—padres, miembros de la comunidad, profesionales médicos—que donaron dinero para este esfuerzo. Boost Oregon no acepta donaciones de ningún tipo de compañía farmacéutica.

 Derechos del autor © 2017 Boost Oregon. Todos los derechos reservados. Boost Oregon® es una marca registrada de Boost Oregon.
 

You can order printable and physical copies of our Parents' Guide to Children's Vaccines through our store.

 

Introducción

Boost Oregon sabe que usted quiere tomar las mejores decisiones para la salud de su hijo. Pero como muchos temas relacionados a la crianza de los hijos, hay mucha información contradictoria sobre las vacunas infantiles.

Esta guía lo ayudará a lidiar con toda la información que reciba y que entienda los hechos sobre las vacunas son basados en evidencia científica. Probablemente ha investigado en internet y hablado con sus familiares y amigos sobre los beneficios y riesgos de las varias vacunas. Ahora es su oportunidad para aprender de médicos expertos y padres como usted que han tenido preguntas e inquietudes sobre las vacunas para sus hijos.

Además de esta guía, la página web de Boost Oregon ofrece información y recursos que lo ayudarán a usted y a su hijo en el camino hacia una buena salud. Reciba respuestas a sus inquietudes sobre las vacunas, aprenda de experiencias de otros padres y únase a una comunidad que cuida de la salud y del bienestar de nuestros niños.

Boost Oregon también ofrece talleres para padres buscando respuestas a sus preguntas relacionadas con la vacunas. Vaya a para ver las fechas y lugares de las clases.

Gracias por leer esta guía. Sabemos que ser padre puede ser difícil y estamos aquí para apoyarlo. Como una organización dirigida por padres como usted, Boost Oregon tiene como objetivo asegurar que todos los niños tengan la oportunidad de vivir una vida saludable.

 
 

Un mensaje de nuestra fundadora

Como usted, soy una madre que le importa mucho la salud de sus hijos. Cuando quedé embarazada con mi primer hijo, aprendí que muchos padres alrededor mío— personas inteligentes, con escolaridad y atentas—decidieron atrasar el proceso de vacunar o no vacunar a sus hijos. Me pregunté si debía tomar decisiones similares para mis hijos.

Hice mi propia investigación por internet y estaba sorprendida por la información contradictoria que encontré. Tenía muchas preguntas. Mi esposo y yo escogimos a un pediatra en quien confiamos y él nos ayudó a ordenar toda la información y contestó nuestras preguntas. Decidimos vacunar a nuestro hijo a tiempo e hicimos lo mismo con nuestro segundo hijo.

Fundé Boost Oregon porque reconocí la necesidad de educación sobre las vacunas en nuestro estado. Sé que al igual que yo, quiere tomas las mejores decisiones posibles para la salud de su hijo. Espero que esta guía, al igual que nuestros otros recursos, lo ayude.

Nadine A. Gartner

Fundadora, Boost Oregon

 
 

¿Qué son las vacunas y cómo funcionan?

La meta de las vacunas es reducir en gran parte las complicaciones causadas por enfermedades infantiles. Aunque algunas enfermedades pueden hacernos más fuertes después de haberlas tenido, otras causan más daño y nos dejan más débiles. Las vacunas preparan a nuestros cuerpos para combatir enfermedades dañinas a las que estamos expuestos en el mundo.

Para entender cómo funcionan las vacunas, imagine que su sistema inmunológico es como un diccionario. Para cada substancia que su cuerpo encuentra, su sistema inmunológico graba una definición y una acción. La definición es una descripción de la substancia. La acción le dice al cuerpo qué hacer con ella si debe absorberla o atacarla.

Pero antes de que su cuerpo sepa qué hacer, primero debe identificar la substancia. La manera en que su cuerpo identifica algo está basada en las formas encontradas en la superficie del objeto. Estas formas se llaman antígenos— características físicas de un objeto que el sistema inmunológico puede reconocer. Las vacunas ayudan a que su cuerpo identifique cómo es cada infección para que el sistema inmunológico utilice sus defensas naturales para tratarlas.

Por ejemplo, imagínese que su hijo se está comiendo una fresa o frutilla. Es importante que el sistema inmunológico identifique la fresa o frutilla como un alimento y la absorba. Ahora imagínese a un niño que contraiga un resfriado. Es importante que el sistema inmunológico lo haya identificado como dañino y lo ataque. Las vacunas no cambian cómo su cuerpo actúa cuando encuentra algo; sólo ayudan a su cuerpo a identificar lo que ha encontrado.

Los niños nacen con muchas definiciones en blanco para enfermedades infantiles serias como sarampión, tos ferina, y rotavirus, entre otros. Si el niño no es vacunado y enfrenta una de estas enfermedades, toma tiempo para que su sistema inmunológico examine la enfermedad, guarde una descripción y pueda decidir si la enfermedad deba ser atacada. Desafortunadamente, este proceso toma tanto tiempo que para cuando la definición y acción han sido guardadas, la enfermedad tal vez haya causado daños permanentes a su hijo. Las vacunas le enseñan a nuestro sistema inmunológico a combatir enfermedades que de otra forma les tomaría demasiado tiempo reconocer como dañinas.

Una vacuna para una enfermedad en particular puede tener bacterias desactivadas de esa enfermedad o el virus vivo pero debilitado. La vacuna se le administra al niño con definiciones en blanco. Su sistema inmunológico se toma su tiempo en definir cómo se ve la enfermedad y cómo combatirla. Cuando se encuentra a la enfermedad viva por primera vez, su sistema inmunológico estará listo para combatirla inmediatamente y prevenir enfermedades serias o daños permanentes.

 
 

¿Las vacunas todavía son necesarias?

Aunque no veamos muchas enfermedades prevenibles por la vacunación en Oregon o en otros lugares de los Estados Unidos, no quiere decir que estas enfermedades han sido erradicadas. Las vacunas han sido tan exitosas que hemos visto una disminución de enfermedades en los Estados Unidos.

Sin embargo, cuando las tasas de vacunación disminuyen, las enfermedades se vuelven más comunes en nuestras comunidades nuevamente. Por ejemplo, los brotes de sarampión alrededor de los Estados Unidos en el 2014 y el 2015 ocurrieron en gran parte en personas no vacunadas.

Imagínese un jardín comunitario lleno de vegetales saludables y flores hermosas. Aparte de a regar las plantas y abonar la tierra, los voluntarios tienen que deshierbar con frecuencia. Si se aparecen mas voluntarios a deshierbar el terreno que la cantidad de hierbas ha bajado demasiado que no más de dos voluntarios son necesarios. Sin deshierbe frecuente, las hierbas crecen de manera descontrolada y ponen en peligro a los vegetales y las frutas. El jardín entonces necesita que vengan a los voluntarios de nuevo.

Al ir y venir con demasiados o muy pocos voluntarios, el jardín cae en un ciclo sin fin. La mejor alternativa sería determinar la cantidad adecuada de voluntarios necesarios para mantener las hierbas a un nivel aceptable para que el jardín comunitario este saludable. Las vacunas funcionan de la misma manera.

Si dejamos de vacunarnos porque no vemos una enfermedad en particular en nuestra comunidad, esa enfermedad regresará. Algunas enfermedades como la varicela pueden estar erradicadas mundialmente y nos permite no vacunar en contra de ellos. Llegar al nivel de erradicación toma décadas y ese proceso toma más tiempo todavía si dejamos y comenzamos de nuevo a vacunar. Tenemos un largo camino por recorrer en erradicar muchas otras enfermedades infantiles, pero mientras más constantes sean nuestros esfuerzos, más progreso haremos.

 

Leah, Portland OR

"He vivido y trabajao en otros países y tengo familiares en la parte noreste de Brasil, un lugar donde las vacunas se convirtieron en solo accesible para el público general recientemente. Tengo amigos y familiares que son doctores y científicos, algunos han tratado enfermedades que pudieran sido prevenidas con vacunas.

He tenido que consolar a padres de niños que fueron desfigurados, tuvieron daño cerebral o fallecieron como resultado de enfermedades prevenibles. Viví en Denver, Colorado donde uno de mis colegas todavía camina con dificultad con la ayuda de muletas, como lo ha hecho la mayoría de su vida, porque no recibió la vacuna del polio cuando niño y contrajo la enfermedad.

Sé que la mayoría de las personas en Oregon no han visto el horror que pueden causar estas enfermedades. No es sólo porque seamos afortunados. Es porque la médicina moderna ha desarrollado vacunas para prevenir la propagación y el daño de estas enfermedades. Mientras estaba de vacaciones recientemente, mi familia presenció un accidente automovilístico terrible. Un auto se volcó varias veces y terminó en el techo. En el otro auto el pasajero estaba atrapado entre su volante y el respaldo de su asiento. Como los primeros en responder, mantuvimos a las víctimas alertas y hablando hasta que llegaron los paramédicos. Cada uno de ellos tenía abrochado su cinturón de seguridad. Cada uno de ellos sólo sostuvo lesiones menores.

El resultado no fue suerte; fue el resultado de la ciencia detrás de los cinturones de seguridad, bolsas de aire y zonas de contracción, tecnología que nos permite vivir una vida más saludable por más tiempo y sobrevivir las cosas que han matado o mutilado a personas en el pasado.

Igualmente pienso en las vacunas como una tecnología que salva vidas. Mis hijos y yo estaremos en el mundo y siempre habrá la posibilidad de que estemos expuestos a alguna enfermedad que nos pueda lastimar o matar. Gracias a la tecnología de las vacunas, tenemos la oportunidad de alejarnos sin daño alguno."

 
 

¿Las vacunas son seguras?

Las vacunas son unas de las medicinas más estudiadas y monitoreadas que tomamos. Miles de horas de investigaciones alrededor del mundo van a cada vacuna para asegurar que sean seguras y efectivas antes de ser distribuidas al público general. Hasta despues de que hayan sido distribuidas al público, las vacunas continúan siendo probadas y monitoreadas por seguridad.

Para que las vacunas valgan la pena, es importante que tengan menos efectos secundarios que el daño que la enfermedad por si sola causaría. Hay muchas maneras en que las vacunas pueden ser formuladas para asegurar que sean seguras y efectivas. Algunas vacunas pueden contener una dosis muy pequeña de la bacteria o virus que estaría presente en la enfermedad como tal. Las vacunas con un virus vivo pueden ser cultivadas en ambientes que promueven cepas bacterianas más leves, haciendo que un caso de sarampión se sienta más como un resfriado común. Otras vacunas omiten estos antígenos específicos conocidos como reacciones adversas.

Cuando compartimos la definición de una enfermedad con nuestro sistema inmunológico a través de la vacunación, tenemos una oportunidad para escoger y seleccionar los antígenos que producirán una inmunidad segura y efectiva y dejarán fuera los antígenos que causarian más daño que bien. Por ejemplo, imagine que queramos crea una vacuna para la infección por estreptococo.

Digamos que su cuerpo identifica la bacteria de estreptococo por las siguientes características

Ahora imagine que algunas de sus propias células tienes las siguientes características en su superficie

Observe que dos de estas características se ven iguales. Bacteria de estreptococo y sus propias células muestran una forma similar.

Como resultado, a veces los niños desarrollan enfermedades autoinmunes luego de infecciones por estreptococos. Si fuéramos a hacer una vacuna luego de las infecciones infección por estreptococo, una manera de hacer la vacuna más segura que contraer una infección por estreptococo sería omitir esa gura. Las guras restantes serían su cientes para que su cuerpo la identifique como bacteria de estreptococo pero reduce el riesgo de que su cuerpo se ataque a sí mismo.

La vacuna se vería así

La vacuna incluye todas las figuras: bacteria de estreptococo que se encuentra en sus células.

Esto fue el proceso utilizado en el la vacuna actual de difteria, tétano, y tos ferina (DTaP) y es una de las razones por las cuales los infantes toleran la vacuna mejor que los efectos de la tos ferina. Al reducir la intensidad de una reacción que una enfermedad causaría, una vacuna es mucho menos probable que active una reacción menos deceable que la enfermedad misma. Las vacunas activan a su sistema inmunológico para distinguir de manera más segura y precisa entre lo que es la enfermedad y lo que es su cuerpo.

Shona, Ashland, OR

"Cuando mi hija tenía un año, habían muchas discusiones en los medios de comunicación sobre la seguridad y los posibles efectos secundarios de las vacunas. Me preocupé y decidí aprender más sobre los pros y los contras de las vacunas.

Estudiando recursos respetados y discutiendo mis inquietudes con mi pediatra, encontré que las ventajas eran mejores que los posibles efectos secundarios y la pregunta se convirtió en cómo no voy a vacunar a mi hija? Como cualquier padre razonable, queremos proteger a nuestros hijos.

Las vacunas son el mejor cuidado preventivo que tenemos como protección en contra de las enfermedades y ahora acepto y respaldo todas las vacunas."

 
 

¿Qué es la inmunidad colectiva?

La inmunidad colectiva es cuando la mayoría de las personas en una comunidad están vacunadas y eso puede proteger a aquellos que no lo están. Cuando la mayoría de las personas están vacunadas, las enfermedades no se propagan tan fácilmente. Esto protege a los pocos que no estamos inmunes.

Es importante que los que podamos recibir vacunas lo hagamos para proteger a aquellos que no pueden. Entre los que no están vacunados hay personas que conocemos y queremos: bebés demasiado pequeños para ser vacunados; personas con sistemas inmunológicos muy débiles debido a enfermedades o tratamientos médicos, como la quimioterapia; mujeres embarazadas; personas mayores; y cualquier persona alérgica a alguna vacuna.

Para enfermedades como el sarampión y la tos ferina, aproximadamente de un 90%–95% de las personas en su comunidad deben estar vacunadas para proteger a los que enfrentan mayor riesgo. Para algunas enfermedades, como el polio, una tasa de 80%–85% de personas vacunadas puede ser suficiente. Las tasas de vacunas en Oregon para algunas enfermedades son menores de los límites necesarios y en algunas escuelas al 40%–80% de los estudiantes no están vacunados. Su hijo o comunidad puede estar en riesgo. El vacunarse usted o su hijo es una excelente manera de beneficiar la salud de su familia al igual que la salud de sus amistades y vecinos.

Kellei, Talent, OR

“Mi hijo, Pete, fue diagnosticado con un pineoblastoma (un tumor cerebral muy raro y agresivo) justo antes de su segundo cumpleaños en el 2005.

Este diagnóstico solo le dio un 5% de probabilidad para vivir. Tuvo varisas sirugías para remover su tumor. Luego comenzamos un tratamiento que duró un año e incluyó distintos tipos de medicamentos quimioterapéuticos y radiación. Por supuesto, estos venenos que le administraros a Pete eran para matar su cáncer, pero también afectaron a su pequeño cuerpo. Hubo muchas veces que sus niveles sanguíneos eran tan bajos que su sistema inmunológico no lo podía proteger.

Teníamos mucho miedo en estos momentos porque él estaba sumamente susceptible a contraer cualquier tipo de enfermedad. Si salíamos, Pete tenía que utilizar una mascarilla para tener una barrera entre él y el mundo exterior. Las personas lo miraban y se alejaban porque pensaban que iban a contraer algo de él.

Sí, Pete había recibido las vacunas apropiadas.

Pero, no creo que las personas entineden que cuando deciden no vacunar a sus hijos, no sólo afectan a sus propias familias pero ponen a otros como Pete en riesgo.

Cuando Pete estaba en tratamiento, conocimos a varias familias que perdieron a sus hijos, no por el cáncer pero por las enfermedades que contrajeron mientras sus sistemas inmunológicos estaban comprometidos por su tratamiento.

Pete tiene ahora 10 años, está saludable y libre de cáncer, y su sistema inmunológico lo está protegiendo nuevamente. Pero, hay un sinnúmero de niños comenzando a luchar por sus vidas. La inmunidad colectiva es la una manera de proteger a estos niños."

 
 
 
 

¿Por qué toda la discusión?

Si las vacunas son seguras y necesarias, ¿por qué hay tanta discusión que lo contradice? La oposición a la vacunación ha existido el mismo tiempo que la vacuna misma. En los 1800s, una minoría pequeña pero vocal de opuso la vacuna de la varicela. Hoy día, hay una oposición similar por la vacuna de difteria, tétano y la tos ferina (DTaP); el sarampión, la papera, y la rubéola (MMR/ vacuna triple viral); y el uso de un preservativo con mercurio llamado timerosal.

Es confuso clasificar el mar de información que existe sobre las vacunas en internet y dentro de nuestras comunidades. Usted puede y debe hacerle preguntas al proveedor médico, que tiene experiencia en el cuidado infantil y lo más probable es que ha pasado años entendiendo y administrando vacunas. Boost Oregon, una organización dirigida por padres como usted, lo puede asistir a través de sus talleres comunitarios y otros recursos.

 
 

¿Cómo entender toda la información que recibo?

(Adapted from “Tips for Evaluating Immunization Information on the Internet,” Multnomah County Health Department.)

Mientras hace sus investigaciones, tenga algunas cosas en mente:

  • La información dada debe estar basada en estudios científicos sólidos. Si lo está, estará respaldada por grupos o instituciones dedicadas a la ciencia como asociaciones profesionales o universidades.

  • Transparencia. Una buena página web debe mostrar quién es responsable por la página web y una manera para comunicarse con el administrador de la página web.

  • Observe otros reportajes en la página web y vea a ver si tienen otro motivo. Casi todos los reportajes son de un solo punto de vista como una página que ataca exclusivamente a la medicina convencional sin defenderla, hay una alta probabilidad de que no estén contando toda la verdad.

  • Tenga precaución en cuanto a las sugerencias “conspiraciones.” Hay una amplia red de científicos honestos que den seguimiento a estudios de vacunación sin lazos financieros a la industria. Como lo explicaremos más adelante en esta guía (vea “Las vacunas no son fuentes de ganancias para las compañías farmacéuticas?”), las vacunas generan muy pocas ganancias que el mantener una conspiración mundial costaría más que lo que las compañías farmacéuticas generarían.

  • El que reciba atención de los medios de comunicación no quiere decir que es cierto. Puede ver a una celebridad a favor o en contra de algo, pero es importante investigar más allá de la atención de los medios y ver qué dicen los expertos en el tema.

Cuando evalúe un estudio o declaración en particular, sepa que una perspectiva honesta es una perspectiva balanceada. Los estudios legítimos no sólo escogen la mejor parte de sus resultados o no incluyan factores importantes o variables. Cuando tenga dudas, acuda a su proveedor de salud confiable y busque (escriba cualquier declaración que están estudiando). Las probabilidades son que si una declaración en particular no sostenible, otras personas ya hayan hecho el trabajo y demostrado sus fallas.

 
 

¿Las vacunas pueden causar daño?

Las vacunas, como todas las intervenciones médicas, pueden causar daño. Lo importante es que las vacunas causan menos daño que las enfermedades por las que ofrecen protegen.

Aunque muy extraño, algunas vacunas pueden causar reacciones alérgicas en algunas personas. Si usted, o su hijo, padece de alguna alergia, hable con su médico sobre su inquietud. Algunas vacunas, como la vacuna original del rotavirus, o la vacuna para la gripe H1N1 en los 1970, causó más daño que bien al hacer que las personas estuviesen tan mal como las enfermedades mismas. Estas vacunas fueron eliminadas del mercado y reemplazadas por vacunas mejores y más seguras que protegieron a los pacientes de los efectos peligrosos de las enfermedades originales.

Es importante notar que ninguna vacuna recomendada para utilizarse no se ha encontrado más peligrosa que la enfermedad. Durante el transcurso de varias décadas en las que las vacunas han estado fácilmente disponibles, sólo unas cuantas vacunas han sido retiradas porque se encontró que causaban casi el mismo daño que la misma enfermedad.

En comparación, considere medicamentos para tratar una enfermedad. Las medicinas intencionalmente alteran la función de su cuerpo y a veces tienen efectos secundarios muy diferentes que los pensados. Por otro lado, las vacunas trabajan junto con su cuerpo y entrenan a su sistema inmunológico a combatir enfermedades dañinas. ¿Y los informes sobre las personas vacunadas que como quiera se enferman? Para entender las cifras, tiene que ver la población total y no sólo el brote.

Imagínese un brote en una escuela donde siete estudiantes se enferman, cinco de los cuales fueron vacunados. Debe pensar que la vacuna no está ayudando a nadie o que está empeorando la situación. Pero, debe considerar la población total de la escuela: 50 niños en total, 46 están vacunados y cuatro no. De los 46 niños vacunados, cinco se enfermaron, que es sólo el 10% de todos los niños vacunados. Entre los niños no vacunados, dos se enfermaron, que es el 50% de los niños no vacunados. Sólo parece que los niños vacunados tienen más enfermedades porque hay más niños vacunados. Si 50 niños fueron vacunados y 50 no, habría cinco niños vacunados enfermándose (10%) y 25 niños no vacunados enfermándose (50%). O sea que es importante comparar tamaños iguales de población para obtener el plano completo.

Alison, Portland, OR

"Terror sería la palabra que utilizaría para describir cómo se siente saber por primera vez que tu hijo tiene cáncer. Un escalofrío corre por todo tu cuerpo, tu corazón y tu mente se aceleran. Nosotros nos alegramos al saber que el tipo de leucemia de nuestra hija de 6 años tiene un tratamiento con una alta probabilidad de cura.

Significaría que más de dos años de biopsias de médula ósea, cirugías, transfusiones, punción espinal y quimioterapia. Tanta quimioterapia. Las drogas matarían el cáncer y salvarían su vida, pero también matarían su sistema inmunológico, dejándola vulnerable. Hicimos lo necesario para mantenerla a salvo mientras recibía su tratamiento—abastecernos de desinfectante de manos y limitando los lugares donde la llevábamos. Pasábamos semanas atrapados en la habitación de aislamiento cuando le daba fiebre.

Hicimos lo mejor que pudimos para echar el terror a un lado y mantener a nuestra familia prosperando, pero no podíamos detener el terror cuando nos decían que había un niño con tos ferina en la escuela de mi hija. Tampoco podía detenerlo cuando cancelamos nuestro viaje a Disneylandia durante el brote de paperas. Nuestra comunidad no estaba protegiendo a nuestra hija.

Nuestra adorada comunidad que nos preparaba alimentos, ayudaban a cuidar a nuestra otra hija, le enviaban regalos a nuestras hijas; la comunidad en general que hizo una peluca personalizada, construyó una casa de juegos y proveyó un viaje especial. Nunca olvidaré la factura dental que fue perdonado, las donas con chocolate caliente que aparecían sin ordenar. Hay tantas buenas personas que querían ayudar.

Añoro por el día en el que todas las formas de cáncer tengan planes de tratamiento. Espero que los tratamientos sean menos tóxicos. Mientras tanto, quiero que todos sepan que pueden ayudarnos.

Al vacunar a sus hijos y al mantener a su comunidad saludable es lo más importante que pueden hacer para ayudar a aquellos con cáncer."

 
 

El aluminio es el metal más común en la naturaleza. En los primeros seis meses de vida, su bebé recibe aproximadamente 4 miligramos de aluminio si recibe todas las vacunas recomendadas, comparado con 120 miligramos si su bebé consume leche de soja en formula.

¿Y el aluminio en las vacunas?

El aluminio es un metal común y natural. El aluminio mejora la respuesta inmunológica a las vacunas al permitir menores cantidades de ingredientes activos y, en algunos casos, menos dosis. Aquí están los hechos sobre el aluminio:

El aluminio el metal más común que se encuentra en la naturaleza y el parte de nuestro ambiente todos los días. Existe en el aire que respiramos, el agua que bebemos y la comida que comemos. Por eso fue escogido para las vacunas: nuestros cuerpos ya saben cómo procesarlo y lo hacen regularmente.

La cantidad de aluminio en las vacunas es muy poca. En los primeros seis meses de vida, su bebé recibe aproximadamente 4 miligramos de aluminio al recibir todas las vacunas recomendadas. Sin embargo, durante ese periodo, su bebé ingerirá aproximadamente 10 miligramos de aluminio si usted lacta, 40 miligramos si le da leche en formula, y 120 miligramos si le da leche de soja en fórmula.

Típicamente, su bebé tiene entre uno a cinco nanogramos (billonésima parte de un gramo) de aluminio en cada mililitro de sangre. Los investigadores han demostrado que luego de que las vacunas son inyectadas, la cantidad de aluminio detectable en la sangre de un infante no cambia y aproximadamente la mitad del aluminio de las vacunas es eliminado del cuerpo en un día.

(Data from Vaccine Education Center, “Vaccine Ingredients: What You Should Know,”)

 
 

¿Las vacunas contienen mercurio?

Timerosal, un compuesto con mercurio era un preservativo común utilizado en las vacunas en el siglo 20. En los 1990s, sin embargo, el timerosal fue removido de las vacunas para niños para aliviar las inquietudes de los padres.

Hoy día, las vacunas para niños vienen en frascos de una sola dosis que no necesitan preservativos. Desde el 2001, las vacunas recomendadas por el CDC para niños menores de 6 años no tienen timerosal, excepto los frascos con múltiples dosis. La mayoría de los frascos de una sola dosis y las jeringuillas preparadas de vacunas contra la gripe y la vacuna en aerosol nasal para la gripe no contienen timerosal ni algún otro preservativo.

SABRINA, ASHLAND OR

"Mi hijo falleció de meningitis bacterial un día antes de su segundo cumpleaños. Daría cualquier cosa por que hubiese recibido la vacuna la cual está disponible ahora.

Ningún niño debe morir a causa de una enfermedad prevenible."

 
 

¿Puedo espaciar las vacunas de mi hijo?

Muchas personas asumen que el calendario actual de vacunas no fue creado para el beneficio del bebé pero por la preferencia o conveniencia de la industria médica—y si es así, que podría haber un calendario alterno de vacunas que es mejor para el bebé.

Resulta que este no es el caso en lo absoluto. El calendario actual en los Estados Unidos es el producto de una colaboración reflexiva e informada entre especialistas en pediatría, enfermedades infecciosas y salud pública, específicamente y sólamente para el beneficio del niño. Está basado en estudios cuándo las vacunas son mejor toleradas y más seguras y ofrecen la mejor protección para el niño.

Revisemos lo que lo que está detrás del calendario recomendado para que vea la lógica del mismo.

¿LOS ANTICUERPOS MATERNALES PROTEGEN A MI BEBÉ?

Las madres pasan anticuerpos protectores a sus bebés por aproximadamente seis meses y muchas veces le ofrecen protección útil para el bebé. Sin embargo, tienen sus limitaciones. Los anticuerpos dados al bebé crean “inmunidad pasiva,” lo cual significa que esos anticuerpos no pueden ser rehechos. Cuando el bebé crea sus propios anticuerpos, eso es lo que se llama “inmunidad activa,” y es más efectivo en combatir enfermedades. Esto es porque las vacunas todavía ofrecen protección valiosa durante este periodo.

¿EXISTEN RIESGOS DE INFECCIONES A DISTINTAS EDADES?

Algunas infecciones son mucho más severas mientras más joven es el infante como lo son la tos ferina, hemofilia y las infecciones por neumococo. O sea, lo más importante en este momento es proteger al bebé temprano en su infancia. Mientras más retrase vacunarlo en contra de estas infecciones, menos serán los beneficios que recibirá de la vacuna.

Con refuerzos a los 2, 4 y 6 meses, la inmunidad activa del bebé se desarrolla durante este periodo crítico mientras los anticuerpos de la madre desaparecen, dándole al bebé una transición huida a una protección personal en el momento en que se vayan. Si en vez las vacunas no comenzaran hasta los seis meses de edad, la inmunidad activa del bebé no estaría desarrollada completamente hasta meses después. Esto dejaría al bebé con la menor protección durante el periodo más crítico.

¿CUÁNDO LAS VACUNAS PRODUCEN LA MEJOR RESPUESTA INMUNOLÓGICA?

Hay una gran diferencia entre cuándo las vacunas producen la respuesta inmunológica más fuerte versus cuándo ofrecen el mayor beneficio. En muchos casos, la respuesta inmunológica a una vacuna aumenta mientras más edad tiene el niño. La fortaleza de una respuesta inmunológica no es lo que más importa para la salud de un niño sino el grado en el que los niños sufren o no de efectos de salud duraderos.

Una inmunidad perfectamente adecuada y modesta durante de la infancia es más deseable que sufrir mientras el periodo de mayor riesgo sin inmunidad sólo para que puedan experimentar una respuesta inmunológica más fuerte a esa vacuna más tarde—cuando haya menos o ningún riesgo de la enfermedad. Además, una respuesta inmunológica más fuerte a veces significa que habrán efectos secundarios más fuertes.

Para algunas vacunas, como la del sarampión, los bebés jóvenes no responden bien a ella. La vacuna es recomendada sólo después de los 12 meses de edad. Para otras vacunas como la vacuna del neumococo, los bebés pueden responder bien tan temprano como a los dos meses de edad (los bebés menores están en alto riesgo), o sea que se recomienda comenzar el proceso de vacunación a esa edad.

La situación ideal que logre tener inmunidad suficiente para detener que una enfermedad haga daño, a una edad que las enfermedades causan el más daño. Esto puede diferir en distintos lugares en el calendario infantil, todo precisamente colocado y programado para obtener el mayor beneficio con los menos efectos secundarios posibles. Por esto, el alternar el calendario resultará generalmente en más efectos secundarios, menos beneficios o ambos—estaría administrándoles en otro momento que no es cuando su tasa de beneficio a riesgo es mejor.

¿LE DEBO ADMINISTRAR MÚLTIPLES VACUNAS EN UNA VISITA O UNA VACUNA POR VISITA?

Al salir del vientre de la madre, un ambiente estéril, su niño enfrenta trillones de células de bacterias, virus e infecciones por cándidas a través de la piel, nariz, garganta, intestinos, entre otros. Su bebé impide que estos organismos causen enfermedades serias y hace respuestas inmunológicas a todas las células diferentes—a la misma vez. Un niño puede responder a todos ellos simultáneamente gracias a las billones de células inmunológicas que circulas su cuerpo y cada una capaz de hacer su propio trabajo.

Las 14 vacunas en el calendario infantil tienen una cantidad total de 150 componentes inmunológicos—un número pequeño en la escala inmunológica. Cada bacteria en el mundo puede tener de 2,000 a 6,000 componentes inmunológicos y su niño procesa muchas de ellas simultáneamente. Todo el calendario de vacunas, inclusive todo a la vez, puede ser menor que lo que el sistema inmunológico de su bebé maneja todos los días.

Otras consideraciones incluyen la molestia para su familia y el trauma para su niño. Es fácil para las oficinas médicas administrar las vacunas en días distintos. Pero es más difícil para su familia y su niño. Significa duplicar la cantidad de veces que su hijo necesita pinchazos de aguja y perder tiempo del trabajo y o la escuela. Tomas más tiempo para completar una serie de vacunas obviamente atrasa la protección que ofrecen. Tal vez estas desventajas tendrían provecho su tuviésemos evidencia de que administrar vacunas en una escala más extensa sería mejor para los bebés. Pero sabemos que no lo es.

Rachel, Portland, OR

"Cuando tuvimos nuestro primer hijo, le administramos casi todas (no todas) las vacunas recomendadas, en un calendario atrasado, una a la vez. Mientras crecía y le temía a las agujas, se hizo más difícil y era una inconveniencia ir y venir del doctor.

Debido a mi cansancio de estar llevando a mis niños al doctor en múltiples ocasiones, el miedo a las agujas de mi hijo mientras crecía y el hecho de que todavía no había leído evidencia médica actual de que las rutinas de vacunación eran peligrosos (de hecho, comencé a escuchar sobre brotes locales de enfermedades prevenibles en nuestra ciudad natal de Portland, OR), decidimos seguir las guías del CDC con nuestra hija.

He disminuido mis visitas al doctor por más de la mitad y también estoy tranquila cuando le permito jugar con niños de todas las regiones geográficas en casa y cuando viajamos."

 
 

El total mundial de todas las vacunas—para adultos y niños de todas las compañías farmacéuticas que producen vacunas—sólo representa un 2% a 3% de una industria farmacéutica mundial de trillones de dólares.

Las vacunas no son fuentes de ganancias para las compañías farmacéuticas?

Un mito popular es que las vacunas son simplemente una manera simple para que las compañías farmacéuticas hagan dinero. Eso es falso. Las vacunas no son beneficiosas para las compañías farmacéuticas. De hecho, estas compañías generan sus ganancias vendiendo drogas que tratan enfermedades. Por ejemplo, las ventas de la droga Sovaldi para la hepatitis C—sólo un tratamiento por una compañía farmacéutica para una sola enfermedad casi toda vendida en los Estados Unidos—sobrepasó más de 10 billones en un año.

En comparación, las ventas mundiales de todas las vacunas—para adultos y niños de todas las compañías farmacéuticas que producen vacunas—fueron sólo $24 billones en un año. El mercado de vacunas de $24 billones parece ser grande pero sólo representa un 2% a 3% de una industria farmacéutica mundial de trillones de dólares.

Otro punto de comparación es el mercado mundial de la medicina alternativa. Ese mercado, que incluye remedios homeopáticos y varios suplementos, polvos y tés, es una industria de $34 billones, aunque sólo un tercio de los tratamientos han sido probados.

Si las compañías farmacéuticas simplemente quisieran aumentar sus márgenes de ganancia, pararían de fabricar vacunas y sólo se enfocarían en desarrollar y vender drogas y medicinas alternativas.

 
 
 

¿Cómo las vacunas se integran a un estilo de vida natural?

Usted tal vez valora un estilo de vida natural y tiene intensiones de criar a su hijo de esa forma. Tal vez significa que, entre otras cosas, extienda el periodo de lactancia, utilizar pañales de tela, cultivar y consumir alimentos orgánicos y utilizar productos ecológicos para la limpieza del hogar. Algunos padres piensan que las vacunas, que son producidas en laboratorios y administradas en oficinas médicas, no son naturales, y que es mejor para su hijo contraer una enfermedad y crear inmunidad de esa manera.

El contraer enfermedades prevenibles puede tener consecuencias terribles. La gran pandémica de la gripe en el 1918, por ejemplo, infectó a 500 millones de personas mundialmente y mató 3% a 5% de la población total del mundo. (Tauenberger, J. K., Morens, D. M. “1918 Influenza: The Mother of All Pandemics.” Emerging Infectious Diseases. 2006; 12(1):15–22)

El brote de Ebloa del 2013 al 2015, que afectó principalmente a la parte occidental de África infectó a casi 29,000 personas y causó sobre 11,000 muertes. Más cerca a nosotros, el brote de sarampión en los Estados Unidos en el 2015 infectó a 159 personas en 18 estados y Washington, D.C.

Antes de la vacuna del sarampión, casi todos los estadounidenses se infectaban y cientos morían a causa del sarampión cada año.

Porque vivimos en un tiempo y lugar con buen cuidado médico y tratamientos es poco probable que su niño muera de enfermedades como el sarampión u otras enfermedades prevenibles por vacunas.

Sin embargo, el enfermarse y requerir tratamiento afecta de forma negativa la calidad de vida de su familia. Usted y su niño serán obligados a faltar algunos días o semanas del trabajo o escuela mientras su hijo recibe tratamiento y es aislado para no infectar a otros niños. Tal vez su hijo sufra de efectos a largo plazo del tratamiento o enfermedad, como un aumento a su resistencia a antibióticos, cicatrices en la piel por varicela o sarampión, falta de aire a causa de la tos ferina, esterilidad relacionada a las paperas, daño al hígado por hepatitis B, o problemas en los riñones por la enfermedad de neumococo.

LAS VACUNAS BENEFICIAN LA SALUD NATURAL DE LAS SIGUIENTES MANERAS:

  • Desalientan la formación de superbacterias o supervirus. Porque las vacunas le introducen una pequeña parte de la enfermedad al sistema inmunológico, que luego hace que el cuerpo cree su inmunidad a la enfermedad, las vacunas desalientan la formación de superbacterias o supervirus. El tratamiento para una enfermedad, por el otro lado, escoge para la resistencia e infecciones fuertes. Cuando un virus o bacteria es derrotado inicialmente por antibióticos o antivirales, una cantidad pequeña del virus o bacteria tal vez persista sin causar la enfermedad. Aquellas bacterias o virus restantes tienden a resistir tratamientos anteriores y se convierten en superbacterias o supervirus. Por otro lado, las vacunas incitan al cuerpo a que use su propia inmunidad para derrotar a los virus o bacterias y prevenir el desarrollo de superbacterias o supervirus.

  • Le enseñan a nuestros cuerpos a combatir enfermedades de forma natural. La vacunación le da al cuerpo humano las herramientas para crear su propia inmunidad en contra de una enfermedad en particular. Si luego de la vacunación, nuestros cuerpos se encuentran con una enfermedad particular en el mundo, ellos sabrán como combatirlo porque nuestro sistema inmunológico ya tiene la definición para la enfermedad (vea “¿Qué son las vacunas y cómo funcionan?”).

  • Reducen el uso farmacéutico total. Las vacunas contienen muy pocos componentes inmunológicos e ingredientes en comparación a antibióticos. Si en vez de vacunarse, su hijo contrae una enfermedad, el tratamiento que reciba podría incluir antibióticos, antivirales y tal vez otras drogas con más ingredientes y componentes. Estos tratamientos pueden tener efectos secundarios significativos, de dolor de estómago con diarrea e infecciones de cándidas a irritaciones y complicaciones en el hígado y/o riñón.

  • Reduce la contaminación ambiental. Si su niño requiere hospitalización o procedimientos ambulatorios para tratar una enfermedad prevenible por vacuna, aumentará la cantidad de desechos ambientales. De guantes desechables y bolsas intravenosas a productos quirúrgicos de un solo uso y cambios frecuentes de ropa de cama, la cantidad de desperdicios, agua y electricidad requerida para sostener el tratamiento de un solo paciente es impresionante. Si usted vacuna a su hijo, podría evitar todo esto.

 
 

¿Las vacunas pueden causar autismo?

Como padre usted puede estar preocupado sobre el aumento de la prevalencia del autismo y el que no exista una causa conocida para la condición. Las vacunas no causan autismo. Sobre 100 estudios diferentes han buscado una posible conexión entre las vacunas y el autismo, y ninguna ha encontrado evidencia de una conexión. Para más información sobre las posibles causas de autismo, visite la página web del Autism Science Foundation.

El mito sobre las vacunas y el autismo ha cambiado con el tiempo. En el 1998, un investigador británico, Andrew Wakefield, sugirió que la vacuna para el sarampión, las paperas y la rubéola (vacuna triple viral) podían causar autismo. Para determinar si la hipótesis de Wakefield era correcta, investigadores hicieron un estudio comparando cientos de miles de niños que nunca habían recibido la vacuna. Encontraron que el riesgo de autismo era el mismo en ambos grupos y que la vacuna triple viral no causaba autismo.

En el 2010, el estudio de Wakefield que sugería que la vacuna triple viral podía causar autismo fue completamente retirada por su editor. Se encontró que era científicamente cuestionable porque Wakefield manipuló y falsificó los datos. La licencia médica de Wakefield ha sido revocada desde entonces.

Una vez que la teoría de Wake eld fue desacreditada, un nuevo mito apareció, declarando que el ingrediente timerosal causaba autismo. Timerolsal es un preservativo que contiene mercurio que se utilizaba en vacunas para prevenir contaminación. Debido a la presión del público, fue removido de las vacunas en el 1999 y varios estudios desde ese momento han mostrado que no hay un enlace entre timerosal y el autismo.

El mito más reciente dice que el autismo es causado por niños recibiendo vacunas muy pronto y están expuestos a demasiados componentes inmunológicos. Varios hechos hacen que esto sea altamente improbable:

  • Como se ha discutido anteriormente (“¿Puedo espaciar las vacunas de mi hijo?”), aunque la cantidad de vacunas ha aumentado en el pasado siglo, la cantidad de componentes inmunológicos ha disminuido.

  • El reto inmunológico de las vacunas el muy pequeños comparado con lo que los bebés enfrentan todos los días.

  • Los niños tienen una capacidad enorme para responder a retos inmunológicos porque los seres humanos tienen la capacidad de hacer entre 1 billón a 100 billones de distintos tipos de anticuerpos.

Dado el número de componentes inmunológicos en las vacunas, un estimado conservador sería que los bebés tienen la capacidad de responder a aproximadamente 100,000 vacunas a la vez.

Amy, Southern Oregon

"Yo amamantaba a ambas de mis hijas por casi dos años y vacunaba a mis niñas según el calendario regular hasta el 2010 cuando mi hija mayor fue diagnosticada con el síndrome de Asperger, un tipo de autismo. Había leído artículos en la prensa y había escuchado de algunas amistades que no vacunaron a sus hijos que las vacunas pudieron haber causado este “trastorno” en mi hija.

En el momento que estaba investigando vacunas, la actriz Jenny McCarthy estaba promocionando su libro sobre su hijo, su decisión de no vacunarlo, y autismo. Estaba convencida que no quería vacunarlas más.

Estuvimos sólo dos semanas tarde con la próxima vacuna cuando me encontré con mi amiga Sabrina. Su hijo Dylan falleció de meningitis, una enfermedad prevenible por vacuna. Vi a mi doctor en Ashland, quien estuvo dispuesto a tener una larga conversación conmigo sobre la importancia de estar totalmente inmunizado. Ambas hijas han continuado a estar al día con sus vacunas.

Como madre de una hija con autismo, no creo que hay suficiente información que sugiera que las vacunas pudieron haber causado que tuviese autismo. Cuando nació, antes de cualquier vacuna, ella movía sus manos frente a su bosa. Esto era inusual comparado con los otros bebés a su alrededor. Esto se ha evolucionado en el “stemming,” lo cual es un indicador de autismo y los trastornos del espectro autista.

Les urjo a todos que vacunen a sus niños. Nunca quisiera tener que decirles adiós para siempre a mis bebés y arrepentirme de no hacer algo que pudo haber salvado sus vida."

 
 

¿Cómo puedo consolar a mi hijo antes y después de ser vacunado?

Como padres, tenemos una gran cantidad de poder en cuanto a consolar a nuestros hijos. Lo mismo es cierto cuando un niño es vacunado. Para hacer este proceso lo más fácil posible, trate de seguir algunas o todas las siguientes sugeriencias.

(Adapted from "Parents Can Help Reduce Pain And Anxiety From Vaccinations") 

ANTES Y MIENTRAS RECIBE LA VACUNA:

  • Hable con su niño en la mañana de la vacuna y describa los eventos del día, incluyendo la visita al médico y la vacuna. Luego hable sobre el próximo evento para que su hijo se enfoque en la vacunación (ej. “Te compraré helado luego”).

  • Recuérdele a los niños mayores que el vacunarse es parte de mantener un estilo de vida saludable, igual que abrocharse cinturones de seguridad.

  • Cuando llegue el momento de vacunarse, lo más importante que puede hacer es mantenerse calmado/a. Su niño sabe rápidamente cuando usted se siente ansioso y se sentirá más ansioso.

  • La posición de su niño durante la vacunación puede hacer la diferencia. Intente aguantar a su niño de una manera que sea más como un abrazo y menos contenido. El permitirle a un niño mayor que permanezca en posición vertical establece un sentido de control y reduce el miedo.

  • Contacto de piel a piel, amamantar, o chupones pueden calmar a su bebé mientras lo vacunan. El tomar agua con azúcar antes o durante la vacunación puede aliviar el dolor un poco, tal vez reemplazando el dolor con una sensación agradable.

  • Con niños mayores, que intenten respirar profundo. El niño puede dejar el brazo donde está recibiendo la vacuna suelto, respirar profundo antes de la vacuna y exhalar mientras lo vacunan. El enfocarse en respirar ofrece una distracción que puede competir con el dolor.

  • Hable con su médico sobre utilizar un agente anestésico antes de la vacuna, como una crema con 4% de lidocaína (disponible sin receta en la mayoría de las farmacias). Se aplica a la piel y adormece el área para que la vacuna sea menos dolorosa.

  • Pregúntele a su médico sobre un bloqueador, una herramienta plástica que bloquea el dolor de la inserción de la aguja. Si no tiene uno, puede comprarlo en por internet o en la mayoría de las farmacias.

LUEGO DE RECIBIR LA VACUNA:

(Adapted from the Immunization Action Coalition, “After the Shots . . . ”)

  • Intente de distraer a su niño con un juego, dibujos animados, un peluche o una canción. No se aferre al evento luego de que termine. Enfatice qué esta bien y ya paso todo y siga con su dia normalmente.

  • Si su niño está irritable luego de recibir la vacuna o le da fiebre, le puede dar acetaminophen (Tylenol) o ibuprofen (Advil) para disminuir el dolor. Si su niño se siente incómodo por más de 24 horas, o la fiebre alcanza una temperatura que su médico le dijo que se preocupara, llame a su doctor.

  • Si su brazo o pierna está in amado, caliente, o rojo, aplique un paño frío y mojado sobre el área para que se sienta mejor. Si el enrojecimiento o el dolor aumenta luego de 24 horas, llame a su médico.

 
 

Recursos adicionales

Para más información sobre vacunas infantiles, visite la página web de Boost Oregon, comuníquese con nosotros a través de info@boostoregon.org, únase a nuestra página de Facebook, y síganos en Twitter y Instagram.

Otros recursos nacionales y fuentes de información en Oregon incluyen las siguientes:

 
 

Conclusión

Gracias por tomarse el tiempo para aprender más sobre las vacunas. Esperamos que esta guía sea útil para usted. Si tiene preguntas, por favor asista uno de nuestros talleres (visite www.boostoregon.org/events para fechas, horas y lugares), échele un vistazo a los recursos listados arriba y hable con su médico. Todo lo que quieren los padres es tomar las mejores decisiones para la salud de sus niños y juntos podemos asegura que todos los niños tengan una oportunidad a una mejor vida.

(visit events for dates, times, and locations),